La Guerra de los Mundos o La Guerre des Mondes (2019) en su versión original, es la nueva apuesta de Fox y Canal+ por la adaptación del clásico de H. G. Wells. Esta coproducción americana, francesa y británica apuesta por la ambientación actual, como la película homónima protagonizada por Tom Cruise (2005). No la confundáis con la, a mi juicio, soporífera miniserie de la BBC (2019) ambientada a principios del siglo XX, casi la misma época que la novela y más fiel (que no calcada) a la misma.
Con ocho capítulos de entre 40-50 minutos, frente a los tres de la BBC, la serie se ambienta en distintas localizaciones europeas donde veremos que la invasión extraterrestre les ha golpeado por igual. Concretamente, vamos a tener tres líneas argumentales, que si bien son prácticamente idénticas, se desarrollan en lugares diferentes: Francia, Inglaterra y los Alpes.
En Inglaterra tenemos a la familia Gresham, que se compone de dos progenitores y dos hijos. Sin embargo, el padre se encontraba en Francia en el momento de la invasión, con lo que el hilo argumental será el reencuentro de la familia al completo pese a la gran distancia que los separa. Afortunadamente, los guionistas quisieron darle un poco más de interés a este plano argumento y Emily (la hija) comenzará a desarrollar una especie de conexión con los invasores. Por si fuera poco, a la familia se unirán otras cuatro personas: un exmatrimonio en el que el marido es un experto científico, un celador y un inmigrante. La verdad es que estos dos últimos carecen de interés y resulta difícil empatizar con ellos.
En Francia encontraremos al cabeza de familia de los Gresham, quien tras sobrevivir de casualidad al embate inicial de la invasión, se encontrará a la joven Chloe Dumont que, para variar, está buscando a su hijo Sacha. Una vez producido el predecible encuentro, estos simpáticos franceses decidirán acompañar al señor Gresham a Inglaterra mientras que, ¡oh, sorpresa! Sacha empezará a tener la misma conexión con los alienígenas que Emily Gresham. Casualidades de la vida, ¿verdad?
El último arco argumental tiene lugar en los Alpes con la Dra. Durand y el coronel Mokrani. Juntos intentarán descubrir una forma de combatir la invasión, aunque con ese tristemente representado ejército francés no creo que lleguen muy lejos. A parte de estar caracterizados con armamento americano, los pobres soldados no tienen ni casco (o boina) ni cartucheras para la munición.
A nivel técnico, la serie deja bastante que desear con unos efectos bastante pobres y unos escenarios que van de lo extremo, con centenares de coches abandonados y cadáveres dispersos, a lo minimalista con la nada o algún desgraciado ahí tirado. En este sentido, la de la BBC le lleva una gran ventaja. Respecto a los extraterrestres, olvidaos de los clásicos trípodes con sus temibles rayos caloríficos. En su lugar, son sustituidos por una especie de perros cibernéticos que no se aprecia muy bien qué disparan (o matan de pena), y que tan pronto resisten cien disparos como uno.
Los primeros episodios de la serie recuerdan en cierta medida a la primera temporada de The Walking Dead, donde la supervivencia y la búsqueda de la familia perdida son la prioridad. Habrá que ir profundizando en la trama para que alguien se moleste en buscar la forma de combatir la amenaza que ha diezmado a la población mundial. Por tanto, encontraremos una gran cantidad de diálogos insulsos, que si no fuera por la dosis cuidadosamente estudiada de acción/tensión que intercalan, nos ayudarían a dormir muy bien.
La temporada acaba con un cliffhanger de manual, que a los valientes que hemos llegado hasta ese momento nos dejará, seguramente, con ganas de más. Supuestamente, los rumores indican que habrá una segunda temporada que yo, por mi parte, estaré encantado de ver, y ello se debe a que soy un fan incondicional del género postapocalíptico; especialmente del de invasiones alienígenas.
En definitiva y siendo realista, si no os gusta la temática extraterrestre, enterrad esta serie en el agujero más profundo que encontréis, y si os gusta, intentad darle una oportunidad. No creo que os ofrezca nada nuevo, pero al menos son solo ocho capítulos.
Un saludo.
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